Toda la verdad y nada más que la verdad
La fruta tal vez ahora la tengas detrás
Bueno, tal vez puedas lidiar con todos los retos que te lande la Madre Naturaleza, excepto por esa hemorroide del tamaño de una cereza, o un limón, que de pronto ha aparecido en, o alrededor de, tu trasero.
Las hemorroides, que también pueden ser internas o externas, son comunes durante el embarazo. Son realidad venas varicosas (lee a continuación) en el recto.
Lista de pendientes
Regálate un masaje
Con todos tus dolores, molestias y tensiones adicionales (eso sin mencionar las hemorroides), es un excelente momento para que te regales un masaje de maternidad. Es bueno para el cuerpo y la mente. Para que te lo den, recuéstate de lado o, lo que es mejor aun, en un colchón diseñado especialmente con un agujero para el vientre que te permite acostarte bocabajo sin importar el tamaño de tu panza.
Debes asegurarte de que el masajista esté calificado para hacer masajes de embarazo; habla con él previamente.