Toda la verdad y nada más que la verdad
El embarazo puede sentirse como un trabajo
No importa cuanto ames tu trabajo, odiaras trabajar este trimestre. Por lo pronto, tu jefe real es el embarazo.
No quieras tomarte un tiempo de descanso porque prefieres ahorrarlo para después, en caso de que lo necesites. Tampoco quieres viajar por asuntos de trabajo.
(¿Cómo podrías sobrevivir a un avión si ni siquiera puedes meterte al elevador sin sentir arcadas?). Estás exhausta. No quieres trabajar. Esta es la parte más difícil y desagradable del embarazo. Estos son los días en los que el embarazo no se siente como una dicha, si no como un trabajo arduo.
En este momento
Decirle a tu jefe podría convenirte
Probablemente estés preguntándote cuando dar la noticia en el trabajo. Aquí te presentare algunas razones por las cuales podría ser mejor decirle a tu jefe antes, en vez de después.
Quizá tu jefe:
- Te perdone las moronas de galletas en tus memos.
- No te recrimine si te quedas dormida sobre tus documentos en lugar de trabajar en ellos.
- Se compadezca de ti y te deje salir temprano en los días que te sientas peor.
- Te deje dormir en su sillón durante la hora de la comida.